WRC 2017, las claves de los nuevos coches

02/05/2016

Hace unos días, Volkswagen Motorsport y Citroën Racing lanzaron sendos comunicados y material gráfico en los que se adivina muy claramente las formas que tendrán los nuevos Polo R WRC 2017 y C3 WRC 2017. Más allá de la oportunidad de las marcas de informar sobre su trabajo de futuro, estas fotografías son un excelente punto de partida para recordar una de las decisiones más trascendentales para el futuro del WRC, tomada en el Consejo Mundial de la FIA en la ciudad de México en julio de 2015.

Una muestra de lo que será la nueva era de los rallyes la hace Volkswagen con su próxima generación del Polo R WRC, actual Campeón del Mundo. El Campeonato del Mundo FIA de Rallyes (WRC) dará un prometedor paso adelante en 2017, con una reglamentación que permitirá coches más potentes, rápidos y espectaculares. Según VW, el Polo R WRC generará alrededor de 380 CV, lo que significa aproximadamente unos 60 CV más que el coche actual.

Al haber más libertad aerodinámica, los coches serán más ligeros, más anchos y con mayores posibilidades aerodinámicas, unos prototipos que visualmente producirán un mayor impacto. Volkswagen inició el desarrollo de la tercera generación del Polo R WRC en verano de 2015, justo cuando la Federación Internacional del Automóvil (FIA) dio a conocer la nueva normativa que será vigente a partir de 2017. Citroën también hizo lo propio con su nuevo C3, que ya ha probado en las pistas de Château-Lastours.

La reglamentación del WRC 2017 incluye muchas innovaciones técnicas espectaculares para los WRC, que incorporarán toda la experiencia que los equipos han adquirido en los últimos años. Serán considerablemente más dinámicos, sin que ello signifique menos seguros. El objetivo es ofrecer un mayor espectáculo para los aficionados: Unos 50 milímetros más anchos, 25 kg menos y más o menos los 380 CV que ya dicen tener en Volkswagen, lo que se obtiene mediante la ampliación de la brida restrictiva de admisión de 33 milímetros (la actual es de 36 mm). Además, el diferencial central electrónico se podrá utilizar para la transmisión de potencia.

Externamente, los cambios visuales más llamativos serán el alerón trasero más grande y un spoiler delantero más ancho. La longitud mínima del coche será de 3.900 milímetros, mientras que el peso mínimo se reduce de 1.200 a 1.175 kg. Todo eso hará que la apariencia de los nuevos WRC cambie de forma significativa, el Rallye Monte Carlo de  2017 será el momento de comprobarlo.

Esta reglamentación tendrá una vigencia inicial de tres años, si bien los vehículos que hayan competido hasta 2016 en dicha categoría podrán seguir participando en las pruebas puntuables, aunque con una clasificación aparte.